lunes, 1 de diciembre de 2008

Maratón Donosti







Se terminó, que pena, con lo bien que me lo he pasado.

Para contar lo sucedido en la maratón, no creo que simplemente importe lo sucedido durante esos 153 minutos del domingo 30 de noviembre, la verdadera maratón comenzó una tarde de verano en mi casa cuando Esteban Monje me dice "¿corremos la maratón de Donosti?" y yo que en ese momento estaba despistado le contesto que si, sin pensar muy bien en lo que estaba contestando.

A partir de ahí entrenamientos, ilusiones, frío, dolor, cansancio, euforia, disfrute, ánimos, descanso y por fin se acerca el gran día.

Los días previos a la carrera no fueron mis mejores días, pensando incluso el día antes en no acudir a la cita, ingresos hospitalarios, operaciones de urgencia y muchas horas en la sala de espera de un hospital pendiente de mi padre estaban poniendo a prueba mi capacidad de saber asumir las cosas que la vida nos va presentando cada día.

Al final estoy en la salida y suena un disparo que indica que debemos ponernos a correr sin pensar en nada más que los km pasen lo más rápido posible.

Me coloco en el grupo de 2h30 desde la salida, la liebre marca el ritmo y todos los que estamos en ese grupo nos limitamos a seguir el ritmo que marca, pero la primera sorpresa es que la liebre va lenta, pasamos el km 10 en casi 36 min y encima se hecha a un lado y nos deja solos, cuando había anunciado que llegaría hasta el km 30.

A partir de ahí se aceleró el ritmo y el grupo que en un principio era muy numeroso se redujo considerablemente, aún así me sorprendió ver un grupo tan grande (podíamos ser más de 40 corredores).

Los km pasaban, yo no me encontraba muy cómodo, me costaba más de lo que esperaba seguir ese ritmo, quizás por el frío y el viento, pero a medida que pasaban los km el grupo se reducía y yo seguía ahí.

Por la media maratón pasamos en 1h15m 36sg, un buen paso para lograr la marca de 2h30, yo me encontraba un poco mejor a pesar de que el ritmo del grupo no era uniforme, hacía mucho viento y cuando entraba de cara el grupo se frenaba mucho, pero cuando era favorable el ritmo se aceleraba considerablemente.

Por el km 28 pasamos en 1h40m06sg, el ritmo perfecto para lograr el objetivo, de ahí al 32 la media fue de 3m37 un poco lento, los siguientes 2 km a 3m42, perdiendo muchos segundos.

Estábamos en el km 34 y el ritmo bajaba mucho, parece que había miedo, que las fuerzas estaban justas, así que decido marcar yo el ritmo y el siguiente km (km 35) lo pasamos en 3m25, el grupo se rompe en pedazos y yo me voy con otro compañero solos por delante del grupo, km 36 y 3m31, llega el km 37 y lo paso en 3m24, voy bien pero el viento es muy fuerte y veo que el grupo compacto también han acelerado el ritmo por que vienen a escasos 15 metros detrás de mi, así que decido esperar un poco para resguardarme del viento, ese km que ya es el 38 lo paso en 3m42.

En el km 38,5 está el último avituallamiento, allí está Inma animándome a tope, voy bien de fuerzas y muy motivado, en ese momento me doy cuenta de que las 2h30 ya las tengo en el bolsillo, así que marcho feliz y contento por lograr mi objetivo.

El grupo es ya muy pequeño, unos 10 o 12 corredores, cuando de repente al girar en una esquina camino del km 39 me encuentro cara a cara con el destino que me dice: " a donde vas?, que te crees que preparando tú primera maratón en solo 6 semanas vas a lograrlo tan fácil?, venga chaval, no seas iluso..."

Así que en el km 39 en una de mis zancadas, mi pie derecho vuelve a tocar el suelo una vez más, empuja hacia atrás e impulsa fuerte para elevar y hacer avanzar mi cuerpo hacia la meta. Es algo que había hecho esa mañana más de 12.200 veces, pero justo cuando estaba impulsando sentí un dolor tremendo en el gemelo, impidiéndome correr con normalidad e inmediatamente me paré.

Estiré e intente seguir corriendo, pero era imposible, mientras veía como el grupo que tantos km me habían acompañado se alejaba, mis aspiraciones por las que llevaba luchando más de 2h desaparecieron en un solo segundo.

Seguí como pude, cojeando y parando a estirar a ver si se pasaba, pero nada, ahora el objetivo era llegar a cruzar la meta, solo eran 3 km, pero serían los más duros, km 40 en 4m37, el 41 en 4m28 y el 42 en 4m56, por fin entro en el estadio y cruzo la meta de mi primera maratón, 2h 33 min.
Allí estaban todos mis compañeros de grupo esa mañana, todos en 2h30, contentos y felices y yo igual de contento pero cojo.
Pero la maratón no termina al cruzar la meta, la maratón terminó esa tarde en una cafetería del paseo de La Concha, en el peine de los vientos, tomando una infusión con el verdadero culpable de toda esta experiencia, Esteban Monje.
Muchas gracias Esteban, por embarcarme en este viaje...
a Alix, por mantenerme motivado y dejarme esas pedazo de zapatillas que fueron genial
a Jordi, por tratarme tan bien antes de la carrera
a Jaione, por esas comidas tan ricas y por ser como es
a Cabanillas por ayudarme a conseguirlo
a todos los que me habéis motivado en este blog, porque sin saberlo me habéis ayudado mucho
y a Inma, por todo...



21 comentarios:

Jazualone dijo...

felicidades, no se como cai aca, hace ya unos meses k tengo blog y todavia sigo sin saber exactamente como se usa
pero feliidades por tu maraton, todo en la vida es una eperiencia nueva :) como dice el spot publicitario de pepsi "animarse a más" :)

Saludos

Jaz

Furacán dijo...

Enhorabuena! sabía que al final iba merecer la pena.

Jandro dijo...

Que barbaridad!
Que manera de correr!
FELICIDADES!!!!

Espero que esos problemas personales se solucionen lo mas rápido posible.

Un abrazo!

Anónimo dijo...

increible lo que has hecho, ten en cuenta que serias el unico que habia preparado esa maraton en tan poco tiempo, ya se que lo que mas te gustara sera el triatlo pero esta claro que lo tuyo es correr, yo tambien me he dado cuenta que lo mio es esto aunque me guste mucho andar en bici pero voy a probar mas en serio y dejar de tanta quebrantahuesos, te salude en el avituallamiento pero no pude hablar mas porque suelo estar un poco atontado despues de esos esfuerzos como creo que ya notaste

sukr

tonicendon dijo...

Es un buen tiempo , disfrútalo.
Pero yo creo que en otra ocasión lo podrás repetir y si esos problemas finales no aparecen podrías recortar unos minutillos
Enhorabuena.

Bellotatlon dijo...

Felicidades maquina, primera maraton 2h33m fuuuuuaaaaaa, y yo contento con mis 3h 20m en Sevilla, mis rodillas se rompieron en el km 37. Envidia sana.

jaime vigaray dijo...

Enhorabuena y a recuperarte bien que ahora toca triatlón.

Anónimo dijo...

ENHORABUENA FER!!!, sabia q era dificil el reto pero tu vales mucho, espero q los problemas personales vayan mejor y cuando te recuperes de la maraton tenemos unos kiwis pendientes....

jabekor dijo...

Felicidades Fernando,eres un Crack de la leche.

Ánimo por todo lo demás.Un abrazo.

Talin dijo...

ENHORABUENA y un abrazo. Y recuerda que esa secuencia de instantes que forman el tiempo, los reduciras cuando quieras, pero de momento a disfrutar y recuperarse.

imadariaga dijo...

Fernando eres un crack !!Enhorabuena y recuperate para la temporada de tri...
saludos
Ibon

emonje dijo...

Sigo diciendo que eres mejor persona que atleta, mucho mejor. Yo no tengo culpa de nada, tu fuiste el que me invitó a comer a casa je,je,je. Inma es la culpable de todo. Por cierto, gracias a ti y a El Macho ya he recuperado 1kg. Un abrazo fuerte

Unknown dijo...

Pedazo maraton
enhorabuena y animo con esos problemas personales

Anónimo dijo...

¿comoque te he dajado las zapatillas? te las he regalado! y aver si con ellas bajas de 2h30 en la próxima
porque el objtivo del grupo era hacer 2h30 o 2h29?.
mucha gente conocida en el mismo, entraron juntos en la pista, con el JM Caámara y sus 46 años el 1º. los triatletas locales Garijo y Aramburu (11 veces este maratón casi siemrre rondando 2h30) y un tal Roberto Clavijo, de Zaragoza, viejo rival en las mal llamadas marchas ciclouristas (2º las dos veces que yo hice 1º en la Perico). el de trescantos Alcoba debió quedarse hacia el 35 pero te pasó durante tu calvario y marcó 2h32.

lo de Esteban, impresionante, es un superclase.

de mi fracaso en Florencia, mejor no escribo aquí, que este es un blog de triunfadores.

Ferroman dijo...

Enhorabuena Fer,ya firmaba yo ese tiempo jejeje,seguro que si el dia hubiese estado mejor hubieras bajado.Ahora ten cuidado que a lo mejor te enganchas a los maratones.
Arriba el animo en lo personal y ahora a recuperar la natacion ,a ver si nos vemos en la pisci,Ciao¡¡

Anónimo dijo...

Ya lo dice la cancion:
"Una piedra en el camino
Me enseno que mi destino.
Era rodar y rodar.
(Rodar y rodar, rodar y rodar)
Tambien me dijo un arriero
Que no hay que llegar primero
Pero hay que saber llegar".
;)
Espero que las dolencias en la pierna fueran solo un sustillo.
Recuerdos a todos

Barón de Benta'ko Erreka dijo...

muy bien , agüelo, muy bien

Anónimo dijo...

ENHORABUENA FERNANDO, TE LO HAS CURRAO MUCHO TIO, UNA PENA EL DIA QUE NO ACOMPAÑO, PERO MUY MUY BIEN.

EMI.

Anónimo dijo...

¡Enhorabuena Fer!

USKAR dijo...

lástima q por poco no lograses lo que te habías propuesto, pero eres un máquina y en cuanto te lo vuelvas a plantear seguro que lo haces aún mejor! Es una gran motivación para gente como yo seguir los pasos de grandes deportistas como tu! ánimo para la próxima temporada y en tu día a día. Has pensado ya objetivos para este año?
AGUR!!

PD: sn te importa te agrego en mi blog
http://uskar21.blogspot.com

Anónimo dijo...

gracias por nada Fer. He vivido tu maratón con tanta o más ilusión que si la hubiera corrido yo y ese día me sentía ansiosa porque no quería perderme nada. Se me hacía eterna la espera en el avituallamiento y te visualizaba mientras viniendo en el grupo, corriendo suelto, respirando profundo... pero hasta que no pasabas, temblaba. La última vez que te vi antes de la meta me fui andando convecida de que lo ibas a conseguir ,que lo ibas a hacer y que nunca ibas a dejar de sorprenderme. En fin, tienes razón, tus angelitos de la guarda no han querido que ésto fuera tan fácil para ti. Creo que estas últimas semanas han sido de un gran aprendizaje para ti en todos los sentidos, y me gusta cada vez más la persona que está a mi lado. El día 30 fue un día agridulce, estabas feliz pero te mereces serlo más y yo estaba feliz por compartir el día con personas tan especiales, pero triste por no haber corrido con Esteban. Habrá otro momento para los 3.